Origen: ELMUNDO

MEDIOAMBIENTE
Denuncian a la ACA por delito ecológico y prevaricación en el río Algars

La parte catalana del Algars fue declarada reserva natural parcial para la protección de especies animales en peligro de desaparición

La entidad ecologista GEPEC-EdC ha presentado una denuncia ante Fiscalía de Medio Ambiente de la Audiencia Provincial de Tarragona por las actuaciones que la Agencia Catalana del Agua (ACA) en el río Algars en Arnes, en la frontera entre Cataluña y Aragón.

Según informa hoy el Gepec, la denuncia viene motivada por la actuación que la ACA, organismo adscrito al Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, ha realizado en el interior del espacio natural protegido de la reserva naturaleza parcial del río Algars, en el término municipal de Arnes, en la comarca de la Terra Alta.

La parte catalana del río Algars (el río hace frontera entre Cataluña y Aragón), afectado por las actuaciones de la ACA, fue declarada reserva natural parcial para la protección de especies animales en peligro de desaparición en Cataluña, tal como determina el decreto 123 / 1987, de 12 de marzo.

Según GEPEC-EdC, es tal la importancia ecológica de este río que fue también incluido en el Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN), en la Red Natura 2000 y declarado Zona de Especial Protección de las Aves (ZEPA) y lugar de interés comunitario (LIC).

Según denuncia la entidad ecologista, la actuación realizada por la ACA ha consistido en la roturación, mediante maquinaria pesada, de un tramo de cauce de este río, con “la eliminación total de la vegetación y la transformación del cauce, convirtiéndola en una simple explanada de tierra, desprovista de toda vegetación y señal de vida, convirtiendo un río lleno de vida y protegido por la ley en un simple canal de paso de agua”.

Estos trabajos, realizados a mediados del pasado mes de diciembre, “suponen sólo la fase inicial de la actuación total que la ACA tiene previsto realizar en el interior de esta reserva natural, ya que se prevé la ampliación de la actuación en un tramo mayor de la reserva, lo que incrementaría, todavía mucho más, el impacto ambiental ya creado en el espacio protegido”, según alerta GEPEC-EdC.

Los ecologistas además aseguran tener constancia de que la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) tiene intenciones de llevar a cabo actuaciones similares en la banda aragonesa del río, espacio también protegido e incluido en la Red Natura 2000.

Si estas previsiones se cumplen, GEPEC-EdC ha avanzado que también lo denunciará ante las instancias judiciales aragonesas.

Según destaca la entidad ecologista en su denuncia, la actuación efectuada por la ACA está explícitamente prohibida por el decreto 123/1987 de creación de la reserva natural.

Así, en el artículo 2.4 del citado decreto, que hace referencia a algunas actuaciones prohibidas en las reservas destinadas a la protección de la nutria, entre las que se encuentra la del río Algars, se dice textualmente: “En estos tramos de río quedan prohibidas las actividades siguientes: eliminación y modificación de la vegetación de ribera, vertido de desechos, escombros y productos contaminantes, así como cualquier actividad que, afectando al lecho del río o a la vegetación que le rodea, suponga una alteración negativa irreversible del hábitat de la especie protegida”.

GEPEC-EdC asegura que la actuación de la ACA también ha supuesto una vulneración de la Ley 12/1985, de 13 de junio, de espacios naturales en varios de sus artículos, entre los que se determina que “son reservas naturales los espacios naturales de extensión reducida y de considerable interés científico que son objeto de esta declaración para conseguir preservar íntegramente el conjunto de ecosistemas naturales que contienen o de alguna de sus partes…”.

La actuación de la ACA podría comportar también responsabilidades penales, según apuntan los ecologistas, por delito ecológico y de prevaricación.

La denuncia también pide que se aclare si el ayuntamiento de Arnes, municipio donde se ha producido la actuación denunciada, estaba al corriente de estas actuaciones dentro de la reserva “y si tiene algo que ver o alguna responsabilidad y, en caso de que sea así, que también se depuren las responsabilidades penales de sus responsables”.

GEPEC EdC lamenta que ésta no es la primera vez que la ACA actúa de forma “agresiva” en espacios naturales y reclama un cambio en las políticas de gestión en ríos y ecosistemas fluviales y, al mismo tiempo, que sean relevados los cargos de la ACA “responsables de la actual política de agresiones y desprecio hacia los ecosistemas fluviales”.