El grupo socialista en las Cortes de Aragón ha respaldado este jueves una iniciativa de Ciudadanos, enmendada por el PAR, que aboga por mantener el castellano como lengua vehicular. Y lo ha hecho solo unos minutos después de que el Gobierno de Pedro Sánchez sacara adelante su polémica Ley de Educación en el Congreso, que instaura precisamente todo lo contrario con la enmienda pactada por PSOE, Podemos y ERC.
La proposición no de ley se ha votado al final del pleno autonómico y ha salido adelante con el apoyo del PSOE, PP, Ciudadanos, Vox y PAR y el rechazo del resto de la izquierda, Podemos, CHA e IU. De este modo, el pleno insta a la DGA a que a su vez inste al Ejecutivo central a mantener el castellano como lengua vehicular en toda España “de acuerdo con la Constitución y los Estatutos de Autonomía”
La tarea de enmendar la plana a la dirección nacional del partido le ha tocado al profesor de Sociología y alcalde de Alcañiz, además de diputado, Ignacio Urquizu, quien ha empezado su intervención indicando que el PSOE no nació contra nadie “sino a favor de los trabajadores, la igualdad, la libertad y la solidaridad”. Urquizu ha argumentado que politizar la lengua resulta una equivocación porque, ha dicho, “es lo más íntimo de las personas porque afecta a su identidad”.
Urquizu ha subrayado que su partido siempre ha sido respetuoso con todas las identidades del Estado y no tiene “ningún conflicto” con que se hablen diferentes lenguas. Por ello, ha sostenido que, respetando la Constitución y el estatuto, su grupo parlamentario no podía oponerse a que el castellano se hable en toda España como el catalán o el vasco en sus respectivos territorios.
El parlamentario ha querido relativizar la polémica al indicar que más del 60% de los colegios aragoneses utilizan un idioma extranjero como lengua vehicular en áreas curriculares no lingüísticas sin que esto suponga que el español hasta desaparecido en Aragón. De la misma forma, ha dicho, hasta la ley educativa del PP de 2013 no se reconoció al castellano como lengua vehicular “y por eso no desapareció de Cataluña o de otros territorios”. De este modo, ha concluido que el debate sobre esta cuestión es “artificial” y, en un ejercicio de autocritica, ha lamentado que no se haya estado “a la altura” para sacar una ley educativa por consenso.
La defensa de la proposición ha corrido a cargo del diputado de Ciudadanos Carlos Trullén, quien ha sostenido que socialistas y populares llevan décadas con una estrategia “equivocada” con el nacionalismo “insaciable” porque han optado por ceder “por un puñado de votos y mantenerse en el poder”. Y frente a los socialistas que sostienen a Pedro Sánchez ha contrapuesto a los de Aragón: “Representan a un PSOE decente”.
La iniciativa de Cs planteaba el mantenimiento del castellano como lengua vehicular sin mención a los estatutos, pero ha aceptado la enmienda del PAR en aras del consenso. Su diputada, Esther Peirat, ha manifestado que no entendía cuál era el problema de reconocer el castellano como lengua oficial del Estado cuando lo dice el artículo 3 de la Constitución. “Vamos a estar siempre con lo que marque la Constitución y el Estatuto”, ha añadido.
La parlamentaria del PP Pilar Cortés ha recurrido a su bagaje como profesora de Derecho Constitucional para asegurar que el carácter vehicular del castellano no se puede negar porque supone un mandato constitucional, tal y como reconoce la jurisprudencia. “Lengua vehicular es la que se utiliza para enseñar y no la que se enseña y ese es el marco constitucional que debe respetar la ley de Educación”, ha dicho.
Para el diputado de Vox David Arranz, el pacto con ERC suponía un paso más en el “debilitamiento” de España y de la lengua que vertebra, y ha lamentado que este tipo de polémicas no se dan “en ningún país del mundo”.
El resto de la izquierda ha respaldado la ley Celaá. La diputada Itxaso Cabrera (Podemos) ha afirmado que la iniciativa de Cs iba en contra de la pluralidad, diversidad y el plurilingüismo de Aragón, mientras Isabel Lasobras (CHA) ha exigido “coherencia” a Cs cuando exige inmersión lingüística en inglés o cuando en muchos colegios de Aragón esta lengua extranjera es la vehicular. Por su parte, Álvaro Sanz (IU) ha acusado a la formación liberal de “atacar” el patrimonio lingüístico y tratar de imponer “con el mismo discurso que critican”.