Las reacciones al anuncio realizado este miércoles por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán (PSOE), sobre la derogación de la actual Ley de Lenguas de 2013 y la recuperación de la normativa lingüística aprobada en 2009 no se han hecho esperar.
Maribel Sancho Timoneda
04/09/2015
Las reacciones al anuncio realizado este miércoles por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán (PSOE), sobre la derogación de la actual Ley de Lenguas de 2013 y la recuperación de la normativa lingüística aprobada en 2009 no se han hecho esperar. En la comarca del Matarraña, el anuncio del presidente de Aragón ha sido acogido o bien de manera positiva o bien con cierta indiferencia por los alcaldes de este territorio donde la lengua materna de la mayor parte de sus habitantes es el catalán. En todo caso, su posición es, respecto al anuncio del presidente, más abierta que la de sus respectivos partidos.
El presidente de la Comarca del Matarraña, Rafael Martí (PSOE), consideró el cambio adelantado por Lambán como “muy positivo” y como “un primer paso”, aunque reiteró que “habrá que dar un segundo para volvernos a sentar alrededor de una mesa y profundizar más en asuntos que con la ley de lenguas de 2009 quedaron sin resolver”. Entre ellos, Martí reclama la cooficialidad del catalán “en las comarcas donde se habla catalán como es el caso del Matarraña”, si bien hizo hincapié en que “es un primer paso” y que la ley anterior aprobada por el PP supuso “la invención de un nombre para una lengua que tiene el nombre que tiene: catalán”.
El vicepresidente de esta comarca y alcalde de Peñarroya de Tastavins, Paco Esteve (PAR), no se pronunció sobre el regreso a la ley de 2009 y la derogación de la que sigue en vigor, pero sí señaló que “después de dos leyes y pasados ocho años, seguimos igual que al principio, cuando lo que hay que hacer es aplicar el sentido común y lo que dice el Estatuto de Aragón, que es claro al respecto”. Para Esteve, “los niños de nuestro territorio tienen que tener el derecho de aprender a escribir su lengua”, si bien se mostró contrario a que sea obligatorio. Pero recordó que “si vamos a las escuelas del Matarraña y analizamos el número de niños que están matriculados en catalán nos daremos cuenta de que los que eligen esa asignatura son la mayoría, por lo que hacerlo obligatorio es innecesario”.
Respecto a quienes alertan de que enseñar la lengua troncal pondrá en riesgo la variedadautóctona, Esteve señaló que “enseñar la lengua común es compatible con las variedades de cada pueblo y con mantener el léxico de cada localidad, que se puede enseñar a los niños igual”. Según su opinión, “es más fácil de lo que algunos quieren hacer ver”.
Otro alcalde del PAR, José Miguel Timoneda, de Valdeltormo, consideró “una tontería hacer ley tras ley para regular la lengua”, ya que “nunca ha habido problemas”.
En cuanto al PP, el presidente del grupo comarcal en la Comarca del Matarraña y alcalde de Beceite, Juan Enrique Celma, recalcó que sobre esta cuestión “hay diferentes sensibilidades” en su partido en esta comarca. “Hay personas con criterios distintos y el grupo no ha tomado posición”, subrayó. Sí lo hizo a título personal y como alcalde de Beceite: “hablamos catalán y esa es la raíz de nuestra lengua”, afirmó. Celma lamentó que el debate “ha derivado en una cuestión política más que práctica”.
Asociaciones
También hubo reacciones para todos los gustos desde diferentes organizaciones sociales y educativas. A favor de la derogación de la actual ley y de regresar a la de 2009 (aprobada durante el mandato del socialista Marcelino Iglesias) se posicionó la Asociación de Madres y Padres Clarió. “Lo importante es que recuperemos el nombre de nuestra lengua”, declaró Pepa Nogués, una de sus portavoces. “La recuperación del nombre académico -perdido con la ley anterior, que denominaba al catalán como “Lengua Aragonesa Propia del Aragón Oriental”, evitará problemas normativos que teníamos con la ley aprobada en 2013″, dijo, al tiempo que subrayó el “carácter simbólico” del anuncio del presidente del Gobierno de Aragón. En su opinión, Lambán “muestra un interés por dotar de dignidad al resto de lenguas habladas en Aragón”, además de que “es un gesto que si se cumple y se traduce a la realidad implicará el cumplimiento del mandato de la Constitución española en materia lingüística, pues esta deriva la responsabilidad de la protección y enseñanza de las lenguas propias en las Comunidades Autónomas”, añadió Nogués.
En contra se manifestó la plataforma No Hablamos Catalán, desde donde se tildó al presidente aragonés de “completo catalanista y velador de los intereses del nacionalismo catalán”. La organizción tilda la Ley de Lenguas de 2009 como una norma “cargada de imposiciones”.
La ley de 2009 cuesta 40 millones, dice el PP, y el PSOE le tilda de “demagogo”
El Partido Popular (PP) calculó que derogar la actual Ley de Lenguas de Aragón de 2013 para recuperar la legislación aprobada en 2009 costará “40 millones de euros, contando con los traductores que se necesitarían en instituciones y centros públicos, el gasto que se llevaría a cabo en centros educativos, así como los cambios en topónimos, en el Boletín Oficial de Aragón y en carteles de carreteras y calles, entre otros”, según la portavoz de Educación del grupo parlamentario del PP en las Cortes de Aragón, María José Ferrando, quien dijo sentirse sorprendida ante el anuncio del presidente aragonés de derogar el texto que permanece en vigor.
Según Ferrando, de los 1,3 millones de aragoneses, el 95% “tienen como lengua materna el castellano, y unos 45.000 utilizan las variedades dialectales de la zona oriental. De estos, dijo, “el 75% rechazan la cooficialidad con el catalán”.
Según el PP, Lambán intenta “satisfacer” a CHA derogando una ley que “preocupa muy poco a la población”.
Las reacciones del PP ante el anuncio del presidente aragonés fueron contestadas por el portavoz del grupo socialista en las Cortes de Aragón, Javier Sada, quien tildó a los populares de “demagogos” por cuantificar el coste de los cambios y les acusó de haber creado un problema donde no había cuando derogaron la ley de 2009 para elaborar la suya. Sada dijo que el PSOE “volverá a hacer una ley de derechos, no de prohibiciones ni de obligaciones”, señaló que “ni se quiere prohibir que los que quieren hablar catalán en una zona donde se habla lo hagan ni obligar a que donde no se hable se hable”. Al mismo tiempo, señaló que “hablar de cooficialidad por parte del PP es mentir” ya que “el único idioma oficial en la comunidad autónoma es el castellano”.
El PAR alarma de la “fractura social” que se puede crear
La portavoz adjunta del Partido Aragonés (PAR) en las Cortes y portavoz en la Comisión de Educación, María Herrero, mostró su preocupación por la inminente derogaciónde la Ley de lenguas de Aragón, puesto que hacerlo “puede acabar provocando una indeseable fractura social” al ser una materia “tan sensible” en la sociedad, según dijo. Según Herrero, la ley en vigor actual (aprobada por PP y PAR en la anterior legislatura)” además del castellano, reconoce como propias, originales e históricas las lenguas aragonesas con sus modalidades lingüísticas de uso predominante en las áreas septentrional y oriental, de forma que lo que hace es poner en valor lo propio, una de nuestras señas de identidad más importantes: nuestra pluralidad lingüística”, añadió
La portavoz de Educación de las Cortes de Aragón también lamentó que en la cuenta oficial de la red social Twitter del Gobierno de Aragón se utilice el término “LAPAO” -acrónimo de Ley Aragonesa Propia del Aragón Oriental que el Ejecutivo anterior rechazó porque ridiculizaba esta denominación. Según Herrero, el hecho de aceptar el uso de este acrónimo es “despreciativo, pancatalanista y no está en la ley que se aprobó”.
C”s: “preferimos instaurar antes el inglés que el catalán”
También desde Ciudadanos se criticó la derogación de la actual ley. Su diputado por Teruel, Ramiro Domínguez, llegó a enumerar hasta “24 variedades del catalán” en el Bajo Aragón hasta el punto que “los vecinmos de La Codoñera no se entienden con los de Beceite”. Domínguez se mostró partidario de que el catalán se mantenga “como hasta ahora, dentro de una tradición oral”,esto es, en casa. El diputado de Ciudadanos añadió que “para que se aprenda el catalán en estas zonas, donde ya lo conocen, preferimos instaurar el inglés”. A su juicio, “no hay que imponer el catalán, aunque si alguien quiere estudiarlo que lo haga”. |