con motivo de la X Jornada del Murciano,
celebrada en la Universidad de Murcia,
el pasado 26 de noviembre de 2018,
y dedicada al aragonés y a su influencia en el murciano.
Reproduzco el texto que envié para la presentación en dicha X Jornada del Murciano, que tuvo lugar en la Universidad de Murcia el pasado 26 noviembre 2018, al ponente, Sr. Quintana i Font, que disertó sobre lo siguiente: “Aragonesismos y fronteras en los territorios de lengua castellana de Aragón, Valencia y Murcia”. Este texto mío de presentación, por su mucha extensión, no se pudo leer, pero sí que se extractó, en parte, (muy resumido), cuando se dio paso su ponencia. Se publicará, completo, el año próximo, al editar las Actas de esta Jornada del Murciano.
Ahora, en señal de agradecimiento, y para público conocimiento, así lo difundo.
Ángel Custodio Navarro Sánchez
Formentera (Illes Balears), 27 de noviembre de 2018.
El texto, en su literalidad, es el siguiente:
A D. ARTUR QUINTANA I FONT, CON ADMIRACIÓN,
Recogiendo la voluntad de l’Ajuntaera pa la Plática, el’Esturrie y’el Escarculle la Llengua Murciana, y no pudiéndome desplazar desde las Pitiüses a esta X Jornada del Murciano, reciba en mi nombre y en el de todos los presentes, Ud., D. Artur, la bienvenía a’esta tierra, y sea bien’allegao en murciano legítimo; y también siau benvingut, siau ben arribat, en bon valencià/català del Carxe, porque este lenguaje, todo él, en toda esa variedad, es el propio de estas tierras.
La ocasión de vuestra presencia en Murcia bien merece unas breves notas de agradecimiento, por mi parte, hacia su persona y el compartirlo ahora en público.
Confirmo que aconsejé que se le convidara a este acto, y nos ilustre con sus conocimientos, y así se establezcan, desde Murcia, y viceversa, lazos de fraternidad para con Aragón, y Catalunya, y las tierras valencianas, y las del Levante del antiguo Reino de Granada (en Almería, Granada y Jaén), hasta justo donde comienza Andalucía, por todo el patrimonio lingüístico que compartimos, de origen aragonés y catalán, hacia el Sureste y el Sur peninsular; cada uno en su particularidad, pero sin perder el norte, en cuanto al origen y a la riqueza que nos hermana.
Y, como sé que vuestros escritos destilan Ciencia, doy cuenta de que la presente ocasión es de las grandes, porque D. Artur es un sabio, pero un sabio de los Grandes: miembro de la Secció Filològica de l’Institut d’Estudis Catalans, y por tanto, académico de esta lengua, el catalán; miembro del Consello Asesor de l’Aragonés; miembro de honor de la Academia de l’Aragonés y presidente de Iniciativa Cultura de la Franja, en Aragón.
Amante de un Aragón plurilingüe y de una España plurilingüe, en todas y cada una de sus lenguas y de las modalidades internas que las componen. Por eso, es experto en catalán de Aragón –donde vive, en el pueblo de La Codonyera, en la provincia de Teruel, y cuyo habla constituyó su tesis doctoral-; en aragonés; en las hablas mixtas entre estas dos lenguas, catalán de Aragón y aragonés y aragonés y catalán de Aragón; y hasta en el castellano dialectal aragonés, sobre el cual también ha investigado y es proverbial cuanto dice; y un ejemplo más que señero para Murcia.
Pero la cosa no acaba ahí, porque también es experto en occitano, y por su residencia académica alemana, en alemán y en inglés, lenguas sobre las también tiene hechas traducciones.
Y, ahora, de lo que se trata, es de sentirle, según lo que este verbo significa en el dialecto; y tomar su buen hacer, como ejemplo, en la defensa de toda esta riqueza y de transmitirla a la posteridad; y honrar a los que nos la transmitieron, como dignos hijos suyos, y ver que la riqueza de las lenguas, es riqueza de las personas, y no un mal, sino un bien; el más preciado.
Pero aún hay más; mucho más, que es un sabio en cosas de esta tierra, o de una parte de esta tierra, muy poco conocida en Murcia capital, y en buena parte de la entera Región de Murcia: es un sabio en el estudio del valenciano/catalán del Carche, esto es del oriente de las tierras de Abanilla, Jumilla y Yecla; y que también merece la máxima protección posible, desde Murcia y desde Cartagena, sede del Gobierno y del Parlamento regional, respectivamente, y no denostarlo o ser indiferente, o pensar, que si algo se hace por esta lengua, que lo hagan los vecinos valencianos, con los que aquél se comparte… y punto, y nada más. Pues, no; que lo que hay que hacer es mucho más; cuanto se pueda por toda –¡he dicho toda!– la riqueza lingüística de la Región de Murcia, y por eso, y si hay representantes oficiales entre el público, que dispongan de inmediato los recursos económicos para el inicio del Atlas Lingüístico del Murciano, mejor que el de la Región de Murcia (por ser aquél más amplio), porque así se iniciará el camino en pro de la protección de estas hablas, en su plenitud, y en su modestia, en todo su ser, del murciano y del valenciano/catalán del Carche, las dos riquezas lingüísticas del marco geográfico murciano, en solidaridad con los vecinos y actuando todos a la par. Y en eso del Atlas, contando, desde ya, con su ayuda y participación, D. Artur, por sus conocimientos sobre el aragonés y el valenciano/catalán, tan importantes para el murciano, en todas las épocas.
Me felicito de que un 24 de febrero de 2015, decidiera yo escribirle, cuando otro buen amigo, y sabio, el Sr. José Ignacio López Susín, jurista aragonés reconocido en el tema del tema del patrimonio lingüístico aragonés, y hoy primer Director General de Política Lingüística del Gobierno de Aragón, me subministró vuestra dirección; y así, en numerosa correspondencia voy aprendiendo tantas y tantas cosas. Y también le cuento mis cuitas, y alegrías, en esta historia, siempre en pro de hacer cosas, buenas, por ese patrimonio lingüístico que compartimos.
Porque de eso se trata, y se lo agradecemos, por su ejemplo y compromiso: de reconocer que esa riqueza existe, la compartimos, la usamos y la queremos transmitir al futuro, Y NO ROMPEMOS NINGUNA LENGUA, Y MENOS AÚN ROMPEMOS EL CASTELLANO, sino que somos conscientes de su flexibilidad, de su amplitud, de su léxico variado, y no uniforme y asfixiante, sino plural, genuino y propio; compartido con la lengua de los vecinos, en ocasiones, y no todo bajo el tamiz del castellano estándar, sino de todas las lenguas, y gentes, que por aquí pasaron y dejaron un legado; transido todo de historia, como bien Ud. ha estudiado por y para el castellano dialectal aragonés, cuyo ejemplo en Murcia, y cuanto menos, su puesta en valor, bien valdría la pena que se siguiera a ultranza, y eso ya sería un intento de alguna auto-identificación y amor verdadero por lo auténtico, en la entera Región de Murcia.
Por todo ello, en fin, me alegro de su presencia en este foro universitario, y espero que asistan y tomen nota de cuanto Ud. diga, y se apliquen el cuento, los que tengan que hacerlo ahí en Murcia, que son muchos; y, como renovados e inspirados por un espíritu de superación de cuanto se ha hecho mal, tras haber sentido (otra vez el dialecto, y lo que este verbo significa, más que simplemente oír) lo que Ud. explique, vuelvan a sus casas, a sus despachos, a sus quehaceres, allí donde toque y pueda uno imaginarse, digan y se digan para sí: – ¡Píjole, con’este que ha venío d’Aragón, y mos ha platicao, pos que razón que tiene!
Gracias, pues, D. Artur, y como Ud. dice, y en aragonés dicen, ¡ENTABÁN, SIEMPRE ENTABÁN!
Ángel Custodio Navarro Sánchez
Formentera (Illes Balears), 26 de noviembre de 2018.