Abstract:
Resumen: Una migración implica mucho más que el movimiento físico de una persona de un lugar a otro. También migran la experiencia, el bagaje personal, profesional, político y militante de aquéllos o aquéllas que mudan su lugar de residencia, de sociabilidad, y llegan a lugares nuevos donde los que habían sido sus mundos hasta la fecha se ven sustituidos por otros: otros espacios, otras gentes, otros ámbitos de relación. Cuando estas personas vuelvan a sus lugares de origen después de haber pasado por uno o más sitios, ya no serán las mismas; llevarán algo más que equipaje en la maleta. De este modo, con la presente propuesta pretendo abordar el fenómeno del colectivismo agrario durante la Guerra Civil Española desde un nuevo prisma de estudio, el de las migraciones. Migraciones llevadas a cabo por algunos de los protagonistas del 36 y otros conflictos previos. El espacio elegido es la retaguardia republicana aragonesa en su parte más oriental, la Franja, en contacto con Catalunya, y las migraciones objeto de estudio son las que tienen el territorio catalán como destino.
El propósito de este análisis es encontrar los puntos de contacto de estas olas migratorias con la movilización obrera sindical catalana, en concreto con aquélla de signo anarcosindicalista, y el carácter de ésta como herramienta para la comprensión de conflictos y adquisición de militancia. Muchos de estos movimientos migratorios serán estacionales, con lo que a su retorno al lugar de origen desarrollarán nuevas prácticas políticas y sindicales, una «importación de militancia» en toda regla. Por tanto, nuestro objetivo último es profundizar en el desarrollo de las culturas políticas, entendiendo que éstas evolucionan a partir de continuidades y elementos de desarrollo tales como el contacto territorial y humano.