Polémica en el grupo de trabajo que debate la ley de Lenguas.
La ponencia que debe estudiar el proyecto de ley de Lenguas que preparan las Cortes de Aragón se ha resquebrajado tras las últimas declaraciones de la integrante del Partido Popular, la diputada Maria José Ferrando. En una rueda de prensa, la parlamentaria aseguró que las enmiendas a la ley que propone la oposición conllevarían un sobrecoste de 35 millones de euros en traductores.
Los grupos de Izquierda Unida y Chunta Aragonesista han tildado de falsas estas afirmaciones y han criticado la actitud poco tolerante de Ferrando. Asimismo, CHA ha abandonado la ponencia. Según la portavoz, Nieves Ibeas, el PP tiene “demasiada prisa por cargarse el actual texto, algo que puede hacer partiendo de su mayoría”.
Adolfo Barrena, de IU, ha atacado a Ferrando por sus declaraciones “tendenciosas y absolutamente irrespetuosas”. Por su parte, el PSOE ha anunciado que se mantendrá en la ponencia pero ha criticado que el PP “utilice rastreramente la ley para esconder su incapacidad para resolver los problemas reales”.
Cabe recordar que parte del malestar referente a la ley de Lenguas viene motivado por el idioma que se les da al aragonés y al catalán. PP y PAR buscan evitar polémicas con las nomenclaturas de “modalidad lingüística de uso predominante en la parte septentrional de Aragón” y “modalidad lingüística de uso predominante en la parte oriental de Aragón”.
La Plataforma No Hablamos Catalán ya ha felicitado a los partidos en el gobierno por su determinación y ha cargado contra la oposición por defender “posturas catalanistas”.